Respiradores con válvula, ¿Eficaces para evitar contagio del virus?
Varias entidades internacionales sanitarias han hecho hincapié en reservar para el personal médico los elementos de protección respiratoria más eficaces en cuanto a filtración de material particulado. Encontramos entre ellos, los respiradores tipo N95, N99 o FFP2 considerados los elementos más eficaces a la hora de filtrar partículas contaminantes evitando así el contagio de cualquier virus e infección. Partiendo de ello, hay que tener en cuenta que este tipo de respiradores pueden tener diferentes características, algunos de ellos, por ejemplo, cuentan con una válvula de exhalación. levitra acheter en france Sobre lo cual, es importante entender el objeto de este recurso y si es indicado o no usar un respirador con válvula para evitar contagio del virus Covid-19.
Función de la válvula de exhalación:
La función de la válvula dispuesta en un respirador es filtrar el aire que inhala el usuario, evitando que ingrese cualquier tipo de partícula contaminante, pero no cumple la misma función con el aire que se exhala. La válvula de exhalación está diseñada especialmente para permitir mayor frescura y comodidad al usuario, ya que elimina la acumulación de calor y humedad.
Dicho de otra forma, la principal función de la válvula de exhalación es disminuir la fatiga de la persona que hace uso del respirador, por eso este elemento es utilizado en mayor medida en laboratorios de bioseguridad, como una herramienta de protección individual ya que evita que el usuario pueda contaminarse con el material biológico de riesgo que está manipulando. O, en otras circunstancias, también es utilizado por personal médico sano, que debe atender a personas infectadas por virus o bacterias.
Recomendaciones para prevenir contagio de virus Covid-19
Se ha comprobado a través de diversos estudios que el principal canal de transmisión del virus Covid-19 son gotículas de saliva o fluidos propagados en el ambiente por una persona infectada con el virus, por esto, respiradores como el N95 resultan tan eficaces para evitar el contagio, ya que, gracias a sus especificaciones de fabricación, logran captar el 95% de estas partículas impidiendo así que lleguen al usuario. Sin embargo, teniendo en cuenta las características anteriormente mencionadas sobre la válvula de exhalación, este elemento podría representar un mayor riesgo de contagio, no para el usuario, sino para las personas en contacto con él, debido a que a través de ella se pueden propagar partículas infecciosas.
Un respirador con válvula de exhalación puede representar mayor riesgo de propagación de contagio si es utilizado por una persona con síntomas o una persona asintomática contagiada.
Pacientes asintomáticos:
Se llama paciente asintomático a aquel que, a pesar de estar infectado con el virus, no desarrolla ni va a desarrollar ningún tipo de síntomas.
Un estudio reciente, realizado por la Universidad de Padua y el Imperial College de Londres, indica que aproximadamente el 40% de la población investigada para el análisis, y la cual resultó contaminada con el virus, no presentaba síntomas al momento de realizar la prueba. Esto quiere decir que este tipo de población es difícil de identificar y aislar por lo que representa un riesgo latente para propagar el virus.
Por lo anterior, no solo las personas con síntomas de contagio no deberían hacer uso de respiradores con válvula de exhalación, si no que no se recomienda ni para el personal sanitario ni para la población en general, porque como se demostró, aunque el usuario no presente síntomas, puede estar contagiado y ser un paciente asintomático. Y aunque la válvula de exhalación no es necesariamente un agujero más, sí hace más fácil la propagación de partículas por parte de portador, a través de este elemento.
Varias entidades internacionales sanitarias han hecho hincapié en reservar para el personal médico los elementos de protección respiratoria más eficaces en cuanto a filtración de material particulado. Encontramos entre ellos, los respiradores tipo N95, N99 o FFP2 considerados los elementos más eficaces a la hora de filtrar partículas contaminantes evitando así el contagio de cualquier virus e infección. Partiendo de ello, hay que tener en cuenta que este tipo de respiradores pueden tener diferentes características, algunos de ellos, por ejemplo, cuentan con una válvula de exhalación. Sobre lo cual, es importante entender el objeto de este recurso y si es indicado o no usar un respirador con válvula para evitar contagio del virus Covid-19.
Función de la válvula de exhalación:
La función de la válvula dispuesta en un respirador es filtrar el aire que inhala el usuario, evitando que ingrese cualquier tipo de partícula contaminante, pero no cumple la misma función con el aire que se exhala. La válvula de exhalación está diseñada especialmente para permitir mayor frescura y comodidad al usuario, ya que elimina la acumulación de calor y humedad.
Dicho de otra forma, la principal función de la válvula de exhalación es disminuir la fatiga de la persona que hace uso del respirador, por eso este elemento es utilizado en mayor medida en laboratorios de bioseguridad, como una herramienta de protección individual ya que evita que el usuario pueda contaminarse con el material biológico de riesgo que está manipulando. O, en otras circunstancias, también es utilizado por personal médico sano, que debe atender a personas infectadas por virus o bacterias.
Recomendaciones para prevenir contagio de virus Covid-19
Se ha comprobado a través de diversos estudios que el principal canal de transmisión del virus Covid-19 son gotículas de saliva o fluidos propagados en el ambiente por una persona infectada con el virus, por esto, respiradores como el N95 resultan tan eficaces para evitar el contagio, ya que, gracias a sus especificaciones de fabricación, logran captar el 95% de estas partículas impidiendo así que lleguen al usuario. Sin embargo, teniendo en cuenta las características anteriormente mencionadas sobre la válvula de exhalación, este elemento podría representar un mayor riesgo de contagio, no para el usuario, sino para las personas en contacto con él, debido a que a través de ella se pueden propagar partículas infecciosas.
Un respirador con válvula de exhalación puede representar mayor riesgo de propagación de contagio si es utilizado por una persona con síntomas o una persona asintomática contagiada.
Pacientes asintomáticos:
Se llama paciente asintomático a aquel que, a pesar de estar infectado con el virus, no desarrolla ni va a desarrollar ningún tipo de síntomas.
Un estudio reciente, realizado por la Universidad de Padua y el Imperial College de Londres, indica que aproximadamente el 40% de la población investigada para el análisis, y la cual resultó contaminada con el virus, no presentaba síntomas al momento de realizar la prueba. Esto quiere decir que este tipo de población es difícil de identificar y aislar por lo que representa un riesgo latente para propagar el virus.
Por lo anterior, no solo las personas con síntomas de contagio no deberían hacer uso de respiradores con válvula de exhalación, si no que no se recomienda ni para el personal sanitario ni para la población en general, porque como se demostró, aunque el usuario no presente síntomas, puede estar contagiado y ser un paciente asintomático. Y aunque la válvula de exhalación no es necesariamente un agujero más, sí hace más fácil la propagación de partículas por parte de portador, a través de este elemento.